¿Quién nos da el más grande ejemplo de oración?
Jesús es nuestro modelo de oración por excelencia y si queremos aprender a orar, podemos comenzar siguiendo su ejemplo. En Marcos 1:35 Levantándose muy de mañana, siendo aún muy oscuro, salió y se fue a un lugar desierto, y allí oraba.
Y sabemos que cuando los discípulos le preguntaron como debian orar, Jesús los enseño por medio del Padrenuestro. Es un modelo de oración que los cristianos podemos tomarlo como una regla para entender los principales elementos que componen una oración.
Principalmente hay una oración que debemos practicar para alcanzar misericordia y poder cumplir con el verdadero propósito de la oración. Esta oración es difícil de practicarla cuando nuestro corazón y pensamientos no tienen una verdadera conexión con la voluntad de Dios.
Los cristianos por medio de la oración muchas veces queremos que Dios haga nuestra voluntad, lo que nuestra carne y finita comprensión espera de la oración.
Por medio de la oración nos acercamos a Dios, exponemos nuestras peticiones y confiamos en que Dios dará solución a lo que nos aqueja. Para que esto acontezca debemos haber recorrido un camino de capacitación y conocimiento de su palabra.
Esto no quiere decir que Dios no escucha muchas de nuestras oraciones. Dios siempre nos escucha y lo mejor en la angustia responde prontamente. el salmista lo expreso de una forma muy expresiva en el Salmo 18:6
En mi angustia invoqué a Jehová, Y clamé a mi Dios. Él oyó mi voz desde su templo, Y mi clamor llegó delante de él, a sus oídos.
Cuando en nuestra angustia clamamos a Dios, el responde prontamente cuando nuestra fe esta activada, debido a que no tenemos a quien más recurrir que a él.
Volviendo a la verdadera oración que debemos practicar continuamente, quiero explicar cual es la voluntad de Dios para nosotros.
Pasos para la oración que conmueve el corazón de Dios
Primeramente debemos pedirle a Dios que limpie nuestra mente y corazón de lo que nos impida despojarnos de los pensamiento mundanos que llenan la mente y que no nos dejan acercarnos al trono de la gracia con un corazón limpio.
Renunciando a todo rencor, raíz de amargura, resentimiento y recuerdo del mal que nos hayan echo en cualquier momento de nuestro vida. Esto se refiere a todas las personas que recordemos o que hayamos olvidado.
Con respecto a esto quiero contar algo referente al tema: "Un día estaba en la iglesia y en medio de las alabanzas oraba y sentí que el Espíritu Santo me guiaba a orar por una familiar. Y en ese momento sentí mi condición y tuve que reconocer delante de la presencia de Dios que no podía orar por ella. Pero mi corazón y mi amor por Dios, me impedían dejar las cosas así y le pedí a Dios con fe, que si el me ayudaba y me limpiaba iba a poder hacerlo y así lo hizo el Señor en su infinita misericordia y sentí la liberación de esa fea raíz de amargura que tenia enquistada en mi corazón."
Como vemos Dios no avergüenza a nadie y trata personalmente con cada uno de nosotros para ayudarnos a ser mejores cada día. Y como humanos tenemos la tendencia a guardar el rencor y el malestar que nos causan las cosas que nos hacen o creemos que nos hacen algunas personas.
En Juan 14:13 Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. y también leer en Lucas 11: 11-13 ¿Qué padre de vosotros, si su hijo le pide pan, le dará una piedra? ¿o si pescado, en lugar de pescado, le dará una serpiente? 12- ¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión? 13-- Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿Cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?
Y que tremendo que nos confronta haciéndonos conocer nuestra condición antes de hacernos ver, que a pesar de todo nos ama y nos da el Espíritu Santo a los que se lo pidamos. Que el es un padre amoroso por excelencia y nunca jamás va a actuar de la forma que nosotros actuamos.
Vemos que la situaciones aunque sean la más difícil, tiene solución cuando nos acogemos a su amor y misericordia. Si practicamos lo suficiente el orar por los demás, despojándonos de todo pensamiento que interfiera con lo que vamos a pedir; vamos a recibir respuestas prontas de acuerdo a la perfecta voluntad de Dios y su voluntad es que no nos perdamos.
Y conociendo las diferentes clases de oración, debemos recordar que no hay necesidad de hacer oraciones pidiendo juicio por nadie. Cuando oramos por las personas, así las consideremos enemigas, orando en bendición vamos a ver muy rápido no solo la bendición y también la corrección de Dios.
Recordemos la justicia y perfección de Dios. El no va a bendecir a nadie si primero no trata con la persona. No es decir toma te bendigo porque este o aquel oro por ti en bendición. No, no y no. Dios prepara a las personas para recibir las bendiciones y no va a dar nada que se vaya a perder inmediatamente.
Si nosotros pedimos muchas cosas para esas personas que queremos que Dios trate con ellas, debemos hacer oraciones dirigidas, pero pidiendo las cosas buenas que son consecuencia de lo que las personas siembran y merecen.
Aunque podemos pedir que el Señor trate de manera especial con las personas y transforme todo aquello que necesita ser cambiado. Ya el proceso será de acuerdo a la voluntad de Dios y conforme a su palabra.
Aquí quiero recordar la oración de intersección de Abraham por Sodoma y Gomorra. Dios nuestro amigo como lo era de Abraham, no quiere hacer cosas a espaldas de nosotros Genesis 18:17 Y Jehová dijo: ¿Encubriré yo a Abraham lo que voy a hacer, 18- habiendo de ser Abraham una nación grande y fuerte, y habiendo de ser benditas en él todas las naciones de la tierra?
Miremos la forma en que Dios respeta a Abraham y su amistad con él. Dios es Dios y puede hacer lo que quiera, no tiene que consultar ni hacer lo que los hombres queremos. ¿Qué clase de preparación y confianza quería Dios que Abraham tuviera para edificar a las naciones? podemos deducirlo fácilmente por la actitud que Dios tenia con Abraham; su amigo.
Abraham era un amigo digno de Dios y por eso fue escogido como padre espiritual de las naciones pasadas, presentes y venideras. Y era digno de la amistad de Dios porque tenia cualidades de su Padre Dios. Una misericordia grande y con respeto hacia Dios intercedió por esas ciudades de pecado. Sin interferir con el justo juicio de Dios cuando le llego a esas dos naciones.
Dios por amor y respeto también a Abraham permitió que se salvara Lot y su familia. Y nosotros no sabemos cuando alguien amado por nosotros va a alcanzar la misericordia de Dios, no por merecimientos, sino por amor a nosotros.
Cuanto más oremos bendiciendo y pidiendo a Dios que limpie nuestro corazón y mente y que impida que se siembren rencores y raíz de amargura, muy seguramente vamos a recibir muchas respuestas de parte de Dios.
Perdonar es un proceso y a veces la ofensa infringida es muy difícil de olvidar, sacarla de nuestros pensamientos y más si vemos constantemente a la persona que ofendió. En ocasiones requiere un tiempo, pero con la ayuda de Dios alcanzamos nuestros buenos propósitos.
Debemos recordar cuan importante son las oraciones y el poder que tienen para cambiar no solo a unos cuantos hombres, sino también a las naciones. Cuando caminamos lo suficiente con Dios debemos pedir como pidió Jabes esta en 1 Crónica 4: 9-10 y también pedir como dice en Isaías 54:2-3 Ensancha el sitio de tu tienda, y las cortinas de tus habitaciones sean extendidas; no seas escasa; alarga tus cuerdas, y refuerza tus estacas. 3- Porque te extenderás a la mano derecha y a la mano izquierda; y tu descendencia heredará naciones, y habitará las ciudades asoladas.
Es una petición que podemos aplicar de forma que el Señor haga crecer nuestros ministerios y nos ayude a interceder no solamente por nuestras familias y congregación. También para ir creciendo espiritualmente y poder orar por las naciones primeramente, por las etnias que quedan dispersas en el mundo y finalmente por los que están en eminencia y deciden los destinos de las naciones.
Todos podemos orar y recibir la bendición de Dios por las oraciones de intersección, recordando que el que toma las decisiones es Dios, ya que su voluntad es buena, agradable y perfecta.
Sabemos que la oración es esencial en la vida del cristiano y cada día aprendemos más y más de Dios y su palabra por medio de ella. Somos hijos amados de Dios y el responde nuestras oraciones.
No te canses de orar, si nos damos cuenta en solo treinta minutos oramos dando gracias a Dios y por muchas cosas. Cuanto más cuando pedimos ayuda a nuestro paracleto que es el Espíritu Santo de Dios.
Dios te bendiga