Somos linaje Real, Sacerdocio Santo, pueblo escogido por Dios.

Somos linaje Real, Sacerdocio Santo,
pueblo escogido por Dios.



La bendición de Dios enriquece...

Somos enriquecidos constantemente con la gloria de Dios.

Su gloria y su misericordia nos alcanza por medio de su palabra.

Los evangélicos en general, estamos acostumbrados a usar mucho las enseñanzas del antiguo testamento,  son muy lindas y muy buenas aplicadas correctamente.

Pero también se debe aprender del nuevo testamento. 

Las epístolas en general, tienen enseñanzas que edifican mucho, sobre todo a aquellos que supuestamente estudiaron religión en los colegios de antaño.

Esas enseñanzas sirven, pero en el mundo convulsionado de hoy es muy útil profundizar la palabra de Dios.

Hay libros y libros cristianos, pero sobre todo hay comentarios biblicos evangélicos que son un tesoro para cualesquier persona o congregación que quiera invertir en ellos.

Debemos ser racionales en las cosas, invertir en buenos libros es algo que edifica no solo a una persona en la familia, sino que es una motivación a los demás miembros a conocer la palabra verdadera de Dios.

Hay devocionarios cristianos que nos ayudan a tener un orden en nuestros devocionales diarios, u hora quieta como le llaman algunos grupos cristianos.

La palabra no debe producir temor. Sabemos que hay cosas en nuestras vidas y nuestras familias que no debemos decir a nadie.

Pero la ayuda del verdadero Dios en los secreto es algo maravilloso.

Porque el mismo Jesús dijo que si cerrábamos nuestra puerta y orábamos en secreto el nos exaltaría en publico.

El conocer a Dios y recibir ayuda adecuada para entenderlo es muy bueno y como dice la Biblia, su Santo Espíritu nos guiara a toda verdad porque orar o pedir como conviene no sabemos.

Dios los bendiga.


                                       Nigella.

















La obra de Dios...





La obra de Dios tiene un significado diferente para cada persona.

Algunos la toman por el momento en que participan de ella y cuando estan en sus demás labores se olvidan de Dios.

Dios es Dios y su obra es su obra, que viene a ser la iglesia y la labor que se desarrolla en ella.

Muchos aunque no sean los nombrados a veces se toman autoridad,  porque creen que los que la dirigen no tienen capacidades o están en pecado y hacen la guerra a los lideres de forma indebida.

Están todavía en más mal estado que los que están dirigiéndola mal supuestamente.  

La moraleja de esta redacción es que las autoridades son puestas por Dios y Dios es quien pone y quita reyes dice su palabra, o sea que nombra sus ministros en sus congregaciones y que si estamos inconformes de forma decente podemos exponer nuestras razones y no ser tropiezo.

Porque los hermanos que son tropiezo a las congregaciones y tienen espíritu de división y contienda, no están siguiendo la palabra de Dios  y si creen que tienen razón la guerra que deben hacerle a los malos ministros es orar, ayunar y confiar en que Dios obrara en el momento adecuado.

Las iglesias no se hacen a la deriva, no se tienen instrumentos mal habidos, ni funcionan porque si.

El respeto que merece un pastor es el mismo respeto que merece un pastor femenino, en el evangelio no hay hombre ni mujer, porque estaríamos desechando la palabra de Dios.

Las mujeres somos animales racionales iguales a los hombres en inteligencia y fuerza espiritual.

las diferencias son físicas, no mentales.
Dios no escucha mas al hombre o mas a la mujer, es justo y su justicia es un atributo divino que no cambia. 

Su justicia es perfecta, la capacitación como en el mundo es gradual para las personas que van llegando.

No se puede hacer bachillerato sin primaria, ni universidad sin bachillerato. Y así todo, si no se crece  y se escudriña las escrituras, no se puede andar solo en el evangelio.

Hay cristianos que no tienen, ni han tenido deuda con la sociedad y hay varios ejemplos de ello.

Por lo cual el maltrato espiritual es un abuso que la iglesia tiene mecanismos para tratar.

El cristiano es de testimonio, que implica servicio y amor, ayuda, compañerismo y lealtad.

Debemos bendecir porque Dios bendice, el que maldice es el hombre.

Dios los bendiga.

                                        Jadeen.