La viña de Nabot

¿Porque el enemigo te quiere arrebatar tu viña?

1 de Reyes 21:3 Y Nabot respondió a Acab: Guárdeme Jehová de que yo te dé a ti la heredad de mis padres. 

Sin temor a equivocarnos casi todos o todos los cristianos hemos escuchado muchas veces las enseñanzas sobre la viña de Nabot y la malvada Jezabel, inclusive nombramos al espíritu de Jezabel que tienen algunas personas.

La viña de Nabot estaba en un lugar estratégico y era un terreno hermoso. Vemos que Acab caprichoso y necio, teniendo un hermoso palacio en un sitio mejor y con todos los privilegios y riquezas de un rey, se encapricha de la viña de Nabot. También una viña productiva y hermosa, la quería para desmejorarla haciéndola un huerto de verduras. 

Así el enemigo representado en el corazón egoísta y vanidoso de las personas que les gusta llamar la atención con lujos mundanos y atrevidos vestuarios, quieren hacer sentir mal a los cristianos que visten sencillamente y sin ostentación, prestando un servicio a Dios.

Quieren dañar las viñas prosperas de las personas que viven en tranquilidad y bendición. El enemigo no se queda tranquilo nunca, no podemos estar desapercibidos. El quiere que renunciemos a nuestra herencia espiritual y material. Que perdamos las batallas, que nos rindamos ante las luchas de la vida y que quedemos en la miseria.

Vemos como Acab se entristece por un bien material que tiene su súbdito y se lo cuenta a Jezabel su esposa dominante y soberbia. Acab débil, egoísta y ambicioso no puede tomar una decisión sabia y renunciar a la viña de Nabot, decae por el bien material que no puede obtener. Esto es la representación de aquellas personas que no valoran lo que tienen y siempre tienen la mirada puesta en los demás y sus pertenencias, porque el egoísmo y la ambición les impide ser felices con lo que tienen. 

Jezabel idea la forma de quitarle la viña a Nabot y Acab solo la toma sin averiguar como alcanzo a obtener la viña. Es mejor no saber la forma en que se obtienen las cosas cuando se sabe que no es licita la manera en que se consiguió el bien.

Los Acab y Jazabeles de este mundo actual también traman robarse nuestra viña, quedarse con nuestra heredad que puede ser la destrucción de la familia, la destrucción de nuestro ministerio, despojarnos de los bienes materiales, robarse nuestros hijos para la carne o los vicios y quien sabe que más.

La viña familiar que tenemos la desea el enemigo, el espíritu inmundo de Jezabel en las vidas de las personas quieren matar al dueño de la viña, destruirlo, alejarlo para tomar posesión de nuestra viña.

Dañar el bienestar familiar, inmiscuirse en nuestras vidas, guiar nuestros pasos por el camino del mal, con sus mentiras y engaños carnales, atrayendo a los mas débiles al pecado con su espiritu dominante y mentiroso.

1:3 Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos, 
1:4 para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros,   

También tenemos una herencia inmaterial que proteger y es la promesa de la vida eterna y resurrección en los postreros días, que es más importante que cualquier bien material que podamos tener. Nuestra redención en Jesucristo es la herencia más importante que tenemos y no debemos perderla jamas por causa de ninguna persona en el mundo.

debemos recordar que las promesas de Dios son en el si y el amén. Dios no es hombre para mentir ni hijo de hombre para arrepentirse. En cristo Jesús somos más que vencedores y aunque el enemigo venga como río el Espíritu de Dios levanta bandera de Victoria con nosotros, sus hijos, herencia de Dios, benditos de su padre.

Dios te bendiga