Cuando somos tropiezo para nuestros hermanos

Dios disciplina a los hijos de él y de todos, sin importar credo, posición social y muchas cosas más.
Satanás es acusador y tiene sus mañas pero no es como Dios, está sujeto a la voluntad de Dios y esto lo vemos en Job y al comienzo de la Biblia, lo usa para llevar la disciplina a los hombres de acuerdo a su pecado.



Algunas veces Dios si nuestro arrepentimiento es sincero pasa por alto algunas cosas, pero siempre no actúa de la misma forma con todos.

Cuando somos unos niños en Cristo (ser niños en Cristo dura muchas veces un tiempo largo) no tenemos el discernimiento que tienen otras personas en el evangelio y de ahí nace la manipulación y muchas cosas más que entorpecen el camino del cristiano que está en crecimiento, especialmente de aquellos que fueron católicos y tienen un buen conocimiento del nuevo testamento, más no del antiguo y les es muy difícil unirse en una comprensión clara de lo que es la palabra.

No hay ningún mérito en decir que soy evangélico si ultrajamos, envidiamos y somos tropiezo para todos aquellos niños en cristo, que aunque tengan más de 50 años están comenzando en los rudimentos del evangelio.

Hay de aquel por el que viene el tropiezo, parafraseo lo que dice la Biblia, hay un idioma castellano universal, que se debería hablar únicamente en las ciudades y países de habla española, pero no es así porque hay muchos dialectos del español y de otras lenguas y esto también es válido y las personas lo usan para varias cosas deshonestas que se practican y que se debe tener cuidado a quien se daña y porque.

Cuando un cristiano sirve de tropiezo a otro que aunque sea de mayor edad, tiene discapacidades y todavía le falta discernimiento para entender las motivaciones de aquellos cristianos adultos intelectualmente y que saben lo que hacen.

Por eso en esta hora tu que lees esta palabra te insto a ponerte en mismo sentir con tu hermano en la carne o en el evangelio, para que sea bendecido y estés en paz en la presencia Dios.


Y recuerda no se debe ser tropiezo para los hermanos y la familia de Dios de cualquier denominación cristiana.


¿Cómo identificas el fruto de una persona?

La biblia dice que somos cartas leídas y que por los frutos nos conocen. Pero también nos habla de los demonios de luz que engañan a los creyentes.

Por eso para identificar a un verdadero cristiano y su fruto se debe tener un tiempo completo en el evangelio que es comenzar en el camino de la búsqueda de Dios, perseverar en él y saber que Dios y su palabra no mienten.


Siempre se habla de las bendiciones y tenemos una mentalidad de recibir bendiciones cuando en realidad debe ser al contrario. Se va a las congregaciones en busca de refrigerio y soluciones en las oraciones y ayunos para las necesidades urgentes que se tienen, pero la mentalidad del cristiano debe ser guiar a los nuevos creyentes a entender que hay que despojarse del egoísmo y la avaricia para poder dar, no pensar en lo que se va a recibir únicamente.

La iglesia no es una fuente de dinero,  Dios no nos va a lanzar el dinero para que se resuelvan los problemas sin tratar con todos los que van a buscar su bendición. En las iglesias hay muchos recursos que se utilizan y que también el estado da para solucionar problemas en las comunidades y que se deben administrar con mucho cuidado, sabiendo que no es para la familia pastoral, sino para todos los que llegan con una necesidad especifica. También enseñar a los nuevos convertidos, simpatizantes o como se quiera llamar que hay que dar, porque las congregaciones se sostienen de lo que dan los creyentes y por eso esas congregaciones tienen el deber de dar las enseñanzas necesarias y honestas para que aprendan lo que es la casa de Dios y el servicio a Dios.

"Muchas personas critican lo que se pide en las iglesias, que piden mucho que no dejan de pedir y en fin una serie de cosas que en realidad personalmente pienso que se da cuando se siente dar o se tiene y es una necesidad real y por mandato bíblico aquellas personas que tienen un convencimiento cristiano de la obra de Dios".

Otra cosa es que a veces se regalan compras y es una bendición, porque una bolsa pequeña con algunos articulos necesarios y de calidad no solucionan la vida de una familia, pero fortalece y da alegría espiritual recibirla.

¿Qué se debe dar en medio del grupo cristiano al que se llega?

Se va a explicar claramente para que se pueda entender que las Iglesias evangélicas no apoyan economías subterráneas, pero no pueden rechazar a esas personas dueñas de esas economías subterráneas.

No se sabe si ellos tienen un llamado y son salvos, Dios hará la obra porque generalmente esas economías subterráneas son patrimonios familiares que involucran a varios grupos familiares.

Personas que lo pierden todo y llegan en absoluta pobreza, que se les debe instruir para que no queden con mentalidad de mendigos y aprendan a valorar la nueva oportunidad que tienen de comenzar de cero con honestidad y aprendiendo valores.

Cuando se hace la obra muchas veces se dan ofrendas que pueden ser recibidas con ciertas condiciones, asesorados por los ministros de la congregación a la que se asiste y a veces las personas tienen necesidades y la esperanza de que se le ayude,  muchas veces no recibe nada, debe ofrecerlo al Señor, porque la Biblia dice que el ojo de Jehová recorre toda la tierra y es verdad porque el ve a los que son perfectos para con él.

Muchas veces no se recibe nada material, pero si se recibe consejos, distracción, se aprenden cosas nuevas y especialmente se da el servicio a Dios con las oraciones y ayunos que se hacen en los tiempos de prueba.

En el caso de las mujeres, es muy lindo cuando tienen un marido que ya no las quiere y tiene otra u otras mujeres en la calle, se aprende a ser fortalecida, levantar la autoestima, se recibe el amor y apoyo de otras mujeres, se aprenden muchas cosas, en el caso de una separación el dolor se logra paliar más fácilmente porque las mujeres son sentimientos y encuentran formas más fáciles para explicar y ayudar con los hijos, los hombres generalmente se dejan llevar por vista; debido a las diferencias particulares que hay en cada sexo, según la perfecta creación de Dios.

El obrero es digno de su salario y todos deben recibir un pago de acuerdo a su labor, Dios es justo y fiel; pero se debe pensar muy claro antes de tomar decisiones apresuradas y saber que el fruto de una persona o una oveja en el caso de los miembros de una congregación o de un ministro como el pastor, los diáconos, el maestro y todos los que componen una congregación los conocemos por muchas cosas y causas que están enfrente de todos.

Los árboles buenos dan buen fruto los árboles malos dan mal fruto, pero Dios es el que tiene la última palabra para cambiar y la disposición la tiene el creyente, en vez de esperar recibir se debe pensar en que se va a dar.

La razón de esta palabra es una alabanza que escuchaba y decía: es lo mejor de mí lo que vengo a darte…

Y ahora que conoces al verdadero Dios  ¿Que estas dispuesto a darle en tu mejor adoración? ¿Cual es aquel nuevo servicio que vas a prestar en medio del lugar que Dios te dio? ¿Tienes un llamado y quieres comenzar a ejercer ese ministerio? o quizás Dios te esta demandando alguna promesa que tu querías que te diera y que hoy en día ya se te olvido o dudas de que en realidad Dios te la haya dado.




La partida de un ser querido sin la salvación

Mateo 19:14 Pero Jesús dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos.

19:15 Y habiendo puesto sobre ellos las manos, se fue de allí.


Vemos que Jesús cuando estaba en la tierra dijo que ellos son de Dios y es triste cuando acontecen hechos como lo que sucedió en una población ganadera colombiana, en los cuales un bus tuvo un accidente y un estallido de gasolina lo incendio y murieron X cantidad de personas entre ellas varios niños.

Los niños tienen la salvación y se van directo al corazón de Dios cuando mueren, pero los adultos si los encuentra el accidente y la muerte sin tener la salvación como dice la Biblia irán al infierno y al gran lago de fuego que es el fin de todos los que no se arrepintieron y volvieron de sus malas obras.

Esa es la gran preocupación de muchos cristianos, especialmente de aquellos ancianos que saben que se acerca el fin de sus vidas porque es ley de Dios que nacemos, crecemos, envejecemos y morimos.

La salvación es personal, de uno con Dios, podemos buscar como dice algunas denominaciones la absolución y de hecho se recibe, pero el hombre no es Dios y Dios delega funciones, pero hay leyes espirituales inamovibles y el arrepentimiento de corazón sincero solo lo reconocerá Dios en el día del juicio final ante el gran trono blanco, porque todos vamos a ser juzgados.

Es una polémica cristiana de todas las personas que participan en la lectura de la Biblia, pero solo aquellos que realmente conocen la palabra revelada, porque la estudian, la viven y tratan de seguir las enseñanzas  de su palabra pueden entender el valor de amar a sus hermanos en Cristo que los ayudan a encontrar refrigerio y a entender las claves principales de la palabra de Dios.

Por eso cuando se muere una persona que amamos de verdad y no estamos seguros de si se fue con la verdad de Cristo y se arrepintió de corazón, nos dolemos, nos dolemos de los extraños que han compartido tiempo con nosotros en el trabajo, nos dolemos del vecino que se muere y cuanto más no nos dolerá que se nos vaya un hijo a una madre, un esposo fiel a una esposa y así podemos continuar con una lista de personas amadas que nos aman y que a su vez nosotros amamos, que queremos ayudar y de pronto hasta reemplazar en ese momento difícil en que sabemos que se tiene que ir cuando está en estado de gravedad por una enfermedad terminal o quedo como un vegetal por cualquier circunstancia.

No es fácil ser médico, no es fácil para el que atiende en una funeraria o el que recibe a los deudos en todo lugar y tampoco es fácil ser un ministro de Dios en estas cosas o situaciones, pero Dios y su inmensa sabiduría debe darnos principios para poder lidiar con estas situaciones y poder ayudar a nuestros hermanos en cristo, no solamente de forma espiritual sino también de otras maneras cuando haya la necesidad.

Somos un pueblo unido y Dios es misericordioso, pero también disciplina a sus hijos y en una ocasión había un problema demasiado grave y la solución parecía casi que imposible porque había muchas divisiones y rencillas que no eran muy fáciles de resolver, pero hubo un momento en que una mujer creía que la señora evangélica era prepotente y orgullosa y pensaba que ella sola tenía la razón porque no se atrevía a decirle  que entonces porque ella pasaba por tantas dificultades y nada se le solucionaba y aquella mujer sin saber lo que pensaba la otra la mira y le dijo: “Dios da para todos lados”.

No debemos creer porque somos evangélicos estamos exentos de la justicia divina y que no nos alcanza a todos, pero los evangélicos tenemos la gracia de Dios, porque el nos sustenta y la palabra dice que en el mundo tendremos aflicción pero que confiemos el venció al mundo. 



Las consecuencias de la desobediencia hoy en día

Romanos 8:31 ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? 

8:32 El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas? 
8:33 ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica. 
8:34 ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.



Desobedecer a Dios no es desobedecer a un ser inmaterial, que no sabe sabe si existe, que no se conoce entre comillas,  si le conocemos y si sabemos que existe, hay instituciones, estamentos y todas esas cosas que guardan el orden de la creación y que cuando se desordena sucede como ha pasado en el mundo, comenzando por la primera guerra mundial y se sigue por las demás guerras que se siguen peleando como pasa  en cada nación, donde hay situaciones de orden público y social que están acabando con los hombres y las familias.

Hay un efecto llamado domino, o avalanchas, que comienzan con un toquecito y terminan saliéndose de control y maldiciendo a la creación.

Pero el entendimiento que da Dios a aquellas personas que son suyas para estar quietas o hacer lo que se debe hacer en el momento debido, es lo que hace que una situación de desastre, de guerra, de maldad, sea de bendición finalmente, porque se resuelvan innumerables problemas que están acosando la vida de todos.

No es fácil para los grandes hombres de la tierra, (aunque no sean tan grandes en algunos momentos para aquellos que conviven con ellos, porque la humanidad está llena de debilidades y todos los hombres hacen muchas veces cosas que no son agradables a los cercanos) tomar decisiones importantes que involucren la vida de las personas o de un grupo social en beneficio de toda una nación.

Desde los tiempos bíblicos hasta la actualidad se han ido cambiando muchos parámetros, formas de vida, implementado tecnología casi que diariamente en la actualidad, la forma de vida, el respeto y todas y cada una de las cosas que sabemos cuándo comparamos la época actual con siglos anteriores, incluyendo la época de los patriarcas.

En la época de los patriarcas  había muchas limitaciones para todos, pero aquellos que obedecían a Dios, representado en sus mayores, sin importar si era hombre o mujer, continuando con el pasaje de Génesis 27:6 en adelante donde se cuenta la desobediencia de Rebeca, obtenían bendiciones mejores.

Seguir la tradición es aburrido, a veces cuando se sale de lo que se espera de la persona se encuentran nuevos horizontes y se tienen experiencias que enriquecen la vida de las personas, pero hay algunas que cuando no se siguen requieren la disciplina de Dios por medio de su representante y Jacob tuvo en poco a su padre al desobedecer la tradición judía y obedecer a su madre.

¿A quién se está obedeciendo en la vida secular y cristiana actualmente? ¿Qué voz escucha? La de la razón, la de Dios, la de la bendición o la del engaño, la desobediencia, la mentira y el pecado.

Porque llego el momento en que Jacob recibió la bendición espiritual y material que anhelaba,  pero en amargura de corazón; su suegro, sus mujeres y sus hijos también lo desobedecían y hacían cosas que lo contristaban y lo entristecían sin haber tenido la necesidad de recorrer ese largo camino que lo desconecto de todos los propósitos de Dios para sus vida y la de su familia.

La heredad es algo muy importante para cada persona, las raíces, y muchas cosas más, porque tenemos un servicio que cumplir en la tierra y se es llamado a distintos ministerios o servicios en las congregaciones, como fue llamado Esaú y Jacob.

¿Qué Dios tan pequeño va a tener bendiciones para un solo miembro de la familia y para los demás no? Si Dios es grande y lo abarca todo tiene un llamado especial para cada persona, en los lugares seculares o cristianos y el da mayor honra al que le sirve con humildad y amor, con perseverancia y a pesar de todas las dificultades o situaciones está con nosotros hasta el fin.


La vida familiar que Dios quiere y la que el hombre lleva

Génesis 27:6 Entonces Rebeca habló a Jacob su hijo, diciendo: He aquí yo he oído a tu padre que hablaba con Esaú tu hermano, diciendo: 
27:7 Tráeme caza y hazme un guisado, para que coma, y te bendiga en presencia de Jehová antes que yo muera. 
27:8 Ahora, pues, hijo mío, obedece a mi voz en lo que te mando.

Esta historia que aparece en el Génesis sobre la familia de Isaac el único hijo de Abraham, entre comillas, porque fue el único hijo en la herencia material y espiritual; tiene tanta sabiduría y tantas enseñanzas que se pueden entender para edificar las vidas y especialmente las familias.

La Biblia en el libro de proverbios habla de la sabiduría  de la mujer sabía que edifica su casa y la necia que la destruye.

En este caso vemos la necedad de Rebeca al espiar a Isaac, primera cosa mala que denota la falta de confianza que había en ellos, debido al favoritismo y las divisiones que tenían por causa de los hijos.

Rebeca amaba más a Jacob y el padre estaba en su derecho de favorecer a Esaú, porque las leyes en aquellas épocas tenían unas connotaciones muy diferentes a las que hay en la actualidad y el hijo mayor era el heredero principal, porque debía ser preparado para proteger el clan familiar; era lo que llamaríamos hoy en día el presidente de una gran empresa.

Esto hizo que ella arbitrariamente lo indujera a desobedecer a su padre. Hace el papel de Satanás induciéndolo a obedecer sus planes y maquinaciones, porque quiere salirse con la suya y que su hijo menor reciba la bendición y los bienes que le pertenecían por herencia a Esaú.

Ella no confió  en la promesa que le hizo Dios a Jacob y quiso anticiparse, porque sus malas obras le impedían ver con los ojos de la fe las grandes riquezas espirituales y materiales que Dios tenia para su hijo y que iban a llegar en la forma debida y más abundantemente de lo que ella esperaba.

Por su necedad destruyo su casa, creo divisiones aún más profundas y lo que es peor entre los hermanos que deben ser unidos para el bienestar de toda la familia, los hermanos deben estar unidos para favorecerse entre ellos y a los demás miembros familiares.

Aplicándolo en la actualidad todo tiene validez, porque las personas están llenas de necedades, tanto hombres como mujeres cuando se dejan utilizar de las malas obras de la carne y del diablo.

La familia es sagrada, los hijos son sagrados porque son nuestra única herencia en la tierra y aunque muchas veces las personas no tienen hijos en la carne; los hijos que nacen del amor de la crianza y esfuerzo personal también tienen el mismo valor que si se hubiera parido o engendrado.

Los padres acostumbran a tener inclinaciones hacia unos hijos más que otros, esto malo y daña el bienestar familiar, creando celos, problemas, rencores ocultos que muchas veces hacen más daño porque no salen a la superficie.

Esto no quiere decir que no se premie a un buen hijo o que se apoye más en uno que otro cuando la necesidad lo exige, pero el amor de una madre es igual para todos con las diferencias de cada uno.

“Si tengo tres hijos uno llamado Pedro, otro María y otro más llamado Juan; no puedo amar a Pedro como amo a María o a Juan. Amo a Pedro como Pedro, a María como María y a Juan como Juan, porque son diferentes y esas diferencias nos deben ayudara tratarlos de acuerdo a su carácter y demás características especiales de ellos”.

También esto quiere decir que no se debe favorecer a uno solo, dejando de favorecer a los demás. Las madres son especiales y deben tratar de encontrar un equilibrio para manejar las situaciones que se presenten, sin olvidar que la palabra de Dios dice que se instruya al niño en sus caminos y aun cuando fuere viejo no se apartara de ellos.

Dios es Dios de familia, aun cuando haya familias disfuncionales y todos los problemas que se presentan actualmente, porque no se puede estar sacando lo pasado y revolviendo las cosas para evitar encontrar soluciones a las situaciones que se presentan.

Es bueno decirles las cosas a los jóvenes y niños, pero hay un momento adecuado para hacer las cosas y también las personas. No hay secreto tan escondido que no salga a la luz y no hay mentira que no se caiga en algún momento de la vida haciendo sufrir a las personas involucradas y no se debe confundir a la niños y aun a ninguna persona por temor o por protección.

Cada persona individualmente debe vivir su vida y conocer todo lo que está involucrado con ella, para que cuando esta o estas personas tengan necesidades puedan recibir ayuda de su propia familia principalmente.

Las familias también tienen divisiones y problemas de todas clases y a veces un buen hermano(a), tío(a) o cualquier pariente puede ser un buen auxiliar o apoyo en la necesidad y el sufrimiento.