Los sueños y la Biblia
Tradicionalmente en el mundo secular siempre se han utilizado recursos para interpretar los sueños de una forma no bíblica. Recordemos que todos los sueños no son de Dios y que nuestro inconsciente actúa en ellos, en muchas ocasiones para manifestar nuestros sentimientos, deseos y problemas.
Job 33:14 Sin embargo, en una o en dos maneras habla Dios;
Pero el hombre no entiende.
33:15 Por sueño, en visión nocturna,
Cuando el sueño cae sobre los hombres,
Cuando se adormecen sobre el lecho,
33:16 Entonces revela al oído de los hombres,
Y les señala su consejo,
Los cristianos sabemos que Dios se manifiesta algunas veces por medio de los sueños y nos da revelación. Los sueños no son una norma para la guia de los cristianos, es una expresión que utiliza Dios en algunos momentos, dando claridad sobre eventos presentes, pasado y futuros, para edificacion del cristiano.
Cuando José tuvo el sueño Génesis 37:6 Y él les dijo: Oíd ahora este sueño que he soñado:
37:7 He aquí que atábamos manojos en medio del campo, y he aquí que mi manojo se levantaba y estaba derecho, y que vuestros manojos estaban alrededor y se inclinaban al mío.
37:8 Le respondieron sus hermanos: ¿Reinarás tú sobre nosotros, o señorearás sobre nosotros? Y le aborrecieron aun más a causa de sus sueños y sus palabras.
37:9 Soñó aun otro sueño, y lo contó a sus hermanos, diciendo: He aquí que he soñado otro sueño, y he aquí que el sol y la luna y once estrellas se inclinaban a mí.
El sueño era claro y a ninguno gusto este sueño. Despertó envidias y odio en sus hermanos. Dios le dio el sueño a José, anunciando un evento futuro. Así Dios nos da sueños para que estemos apercibidos, oremos y que se cumplan cuando son bendiciones o no se cumplan en la circunstancia que no sean agradables y acarrean disgustos y desgracias.
"Personalmente he experimentado la gracia de Dios por medio de algunos sueños. Hace unos años soñe que el diablo se reía y tenia una flor negra en su mano que petaleaba. Cuando desperté ore y le pedí a Dios que salvara las almas o el alma que el diablo quería llevarse. Le pedí con fervor que impidiera que esa persona o personas se fuera de este mundo sin haberlo conocido. En otra ocasión soñé que una multitud de personas caminaba en oscuridad y veía esa cantidad de gente sin saber que pasaba. Cuando desperté ore durante muchos días por el sueño y espere a que Dios me diera la interpretación. Muchos años después se abrió mi entendimiento y supe que era esa multitud de gente que caminaba sin conocer a Dios."
Nuestra vida cristiana no debe estar basada en emociones, sueños, revelaciones y otras cosas más. Debe estar fundamentada en la palabra escrita de Dios y vivir conforme a lo que nos corresponde. No debemos tener en poco esas revelaciones que Dios nos da para edificar, más no para vivir en vanidades y cosas malas como acontece con las personas que están acostumbradas a leer el horóscopo, a tener supersticiones o como se le dice actualmente mitos urbanos.
La Biblia es clara sobre estas cosas en 1 Timoteo 4:1 Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios;
Debemos hasta cambiar los canales de la televisión cuando el programa incluye adivinos o cartas y cosas que desagradan a Dios. La tentación es fácil de vencer en estos casos cuando recordamos todo lo que Dios nos ha dado como hijos suyos. Es fácil de vencer cuando recordamos que tenemos derecho a pedirle a nuestro amado padre celestial palabra para nosotros y nuestra vida.
"En una ocasión hace algunos años me contrataron para escribir una descripciones de artículos sin especificar de que clase. Cuando recibí el trabajo me di cuenta que era una tienda que vendía toda clase de cosas para la suerte y hechicerías. Me sorprendí y rechace la labor a pesar de que me cobrarian una multa en dólares. Mi hijo me dijo que eso era falta de profesionalidad, le conteste que no y que si ellos me hubieran explicado la clase de productos igual la rechazaba. Expuse mi queja a la pagina, explicando que no me habían hablado de que se trataban los escritos y para mi sorpresa no me cobraron la multa. Eso lo hace el Señor."
El dinero que el cristiano recibe se multiplica cuando se gana con honestidad. Cuando nos saltamos los procesos, no pasamos por el fuego de Dios, no vamos a ser victoriosos, no llegaremos a un nivel de autoridad para que las tinieblas retrocedan y seamos libres para el servicio efectivo a Dios.
No podemos darle una explicación a todos los sueños que tenemos. Algunos son frijolitos, comer antes de acostarse o tener en mente una preocupación puede darnos sueños que queremos darle una interpretación, sin tener nada que ver con Dios y nuestra vida.
La mesura, el confiar en Dios, saber que está con nosotros todos los días de nuestra vida hasta el fin como lo dice su palabra, es nuestra confianza. A veces las personas piensan que Dios lanza juicios contra sus hijos por cosas sin fundamento. Dios no lanza juicio sobre nadie, nuestras malas obras causan que tengamos las tribulaciones en ocasiones y sabemos que debemos cortar las maldiciones. Jesús dijo en Juan 16:33 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.
Hay algunos versículos bíblicos que nos advierten sobre los hechiceros, los adivinos y toda clase de idolatría. En Eclesiastés 5:7 Donde abundan los sueños, también abundan las vanidades y las muchas palabras; mas tú, teme a Dios. Debemos vivir en el temor a Dios, hablar es bueno, habemos personas que hablamos mucho y no somos malas, es una condición de nuestro carácter. Hablar por conversar, por enseñar, por transmitir conocimiento, sin criticar, sin calumniar, sin palabra obscenas y mucho más es una bendición para los que saben escuchar y aprender.
Es bueno que las cosas malas que se hablan de los demás, mueran con nosotros. Cuando compartimos para contar las cosas y circunstancias ajenas, cuando señalamos, estamos demostrando falta de amor y falta fe en Dios. Los cristianos debemos amar a los hermanos, bendecirlos con nuestras palabras, compartir con alegría, edificar, corregir con amor y no hacer con otros lo que no queremos que hagan con nosotros.
Dios te bendiga
