Nuestro cuerpo consagrado a Dios

Marcas visibles de ataduras y pactos con el mundo y la carne 

“Y no haréis rasguños en vuestro cuerpo por un muerto, ni imprimireis en vosotros señal alguna.  Levítico 19:28 (Reina-Valera 1960) 

Si nos remontamos a la historia del tatuaje en el mundo, vemos cómo estas  prácticas pertenecían a los pueblos paganos de los cuales el Dios de los israelitas les prohibía que imitaran sus costumbres. 

En https://es.wikipedia.org/wiki/Historia_del_tatuaje  da informacion valiosa en la que muestra que los tatuajes eran principalmente marcas para las sacerdotisas idolatras ajenas a Dios. En medio de los romanos y los griegos mostraban posición social,  jerarquías militares y también la propiedad de los esclavos. En Japón se marcaba a los criminales y se tatuaban los fieles a las mafias.  Muchas tribus utilizaban los tatuajes como una forma particular que demostraba en algunos mensajes mágicos o símbolos sexuales en otros, en algunos eran cosméticos.

Y la respuesta al versículo bíblico de Levítico 19:28 en el nuevo Testamento es en 1 Corintios 6:19-20 ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios (Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)

Cuando por vanidad, moda o para sentir que pertenecemos a una secta o pandilla como acontece en la actualidad en muchos lugares. Con los tatuajes estamos alejándonos de los preceptos bíblicos y dando cabida no únicamente el pecado, sino también a enfermedades debido a la pigmentación de los colores utilizados; en muchas ocasiones dañan los ganglios linfáticos y dan pie a infecciones de diferentes tipos transmitiendo por medio de las agujas e instrumentos utilizados enfermedades como el Síndrome de Inmunodeficiencia adquirida (AIDS) o la Hepatitis B. 

Se ha formado toda una cultura de tatuajes en la que participan especialmente la juventud que pertenece al mundo de la música y la farándula. Esta cultura esta incitando aun a los adultos a cometer grandes ofensas en contra de los niños que en ocasiones son obligados a tatuarse por sus padres, sin ellos entender el motivo de ello y que causa grande dolor a los niños. https://www.eltiempo.com/colombia/otras-ciudades/icbf-lo-que-pasara-con-la-nina-a-la-que-le-hicieron-un-tatuaje-en-pereira-559506?fbclid=IwAR23epRLM9c0X73BFZ17dn1-zALIcR54-hGiOukj9OkjV76vwH2mFJ0XLhs

Antes de tomar una decisión de tatuar nuestro cuerpo debemos considerar varios temas al respecto, como son la salud, la motivación, si queremos quedar marcados de por vida con un motivo que quizás mañana no nos parezca el mejor y no podamos dar marcha atrás a menos que quedemos con una nueva marca no tan llamativa como la primera.

Si queremos hermosear nuestro cuerpo y rostro, hay muchas maneras de hacerlo y que no son tan terminantes como un tatuaje. Nuestro exterior es reflejo de lo que hay en el interior y si queremos tener un interior agradable a Dios, nuestro cuerpo debe estar en lo posible presentado limpiamente y sin marcas que nos identifiquen con culturas o deidades ajenas a Dios.

Debemos pensar si queremos agradar socialmente al hombre cuando nos tatuamos. La razón de los tatuajes son muchas ¿Has pensado si vale la pena marcar tu cuerpo? ¿Qué quieres demostrar pasando por el dolor de las agujas para marcar tu cuerpo? ¿Es necesario ser convincentes a los demás o seguir nuestros propios valores sin imitar a otros? 

Debemos identificarnos como hijos de Dios por muchas cosas, pero nunca por una marca en nuestro cuerpo. Sin importar el tatuaje o la marca con la que recibes a Jesús como señor y salvador personal, eres nueva criatura en Cristo y no debes tatuar tu cuerpo con algún nuevo tatuaje si ya tienes algunos.

Dios te bendiga