Dar con medida y saber que dar
La biblia nos habla del dar. Dice que debemos dar, dar a nuestros hermanos en necesidad, debemos dar para el sostenimiento de la iglesia, debemos dar para recibir bendiciones. Cada cristiano en su vida espiritual da como conviene y con la guía del Espíritu Santo de Dios.
Unicamente no habla del dar, sino también del secreto al dar. Aunque muchas veces debemos participar a los demás de lo que damos para que las personas o mejor nuestros hermanos aprendan a dar.
Cuando enseñamos a dar con el ejemplo, muchas personas también van a dar. Es el tiempo de dar, debemos recordar que hay muchos niños que carecen de recursos para el estudio, sus padres los matriculan con los mayores sacrificios y no tienen para comprarle los útiles escolares, hacen un esfuerzo muy grande para que sus hijos vayan al colegio.
Una idea que se me ocurre es que cuando se compren los útiles escolares de los hijos, si se van a comprar ocho cuadernos, comprar diez o nueve si no se puede más. Si se van a comprar lapices, comprar uno o dos de más para colaborar con los niños que no tienen.
Si se sabe de la necesidad que hay en la escuela donde estudian los hijos, bueno sería darle a la maestra para que de a aquellos niños que no escriben porque no les han podido comprar sus útiles escolares. Si se conoce un niño que no tiene recursos, sin que nadie se de cuenta, se le puede regalar algo de lo que se tiene intenciones de dar. Llevar a la escuela dominical una ofrenda escolar es una buena idea, así como se llevan juguetes, también es una necesidad llevar útiles escolares.
A veces los libros escolares de años anteriores se venden por precios irrisorios para comprar nuevos útiles, que bueno sería ofrendar para aquellos niños que requieren libros para su estudio y que pasan todo el año sin ellos debido a la escasez monetaria que tienen muchas familias.
"Muchas veces decimos: Tiene para comprar cosas que no son tan necesarias y no tiene para comprar los útiles. No es así, en ocasiones las personas necesitan y en otras no. Recuerdo a una amiga mía que trabajaba en una oficina, llegaba toda clase de personas a pedir y ella a veces daba y a veces no daba. En una ocasión en que sacó un billete de mil pesos y se lo dio al hombre, parecia indigente. Me dijo: Yo le doy, cumplo con darle, el vera en que se le gasta. Pero ante los ojos de Dios yo cumplí con darle al hambriento. El hombre podía comprar pan, una empanada, juntar y completar para comprar algo más, o simplemente gastarlo en vicio que viene a ser el alimento que necesitan estas personas".
Dios bendice al dador alegre e invertir en dar a los niños es una buena opción para todos. Recordemos que por los grandes problemas que hay en el país vecino, Colombia a recibido una gran cantidad de familias que traen sus niños y ellos deben estudiar.
2 Corintios 9:7 Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre.
Las bendiciones a corto, mediano y largo plazo son recibidas gracias a la labor que desempeña el cristiano en las comunidades. No debemos dar unicamente al que profesa nuestra fe, parte del testimonio es dar a todo el que lo necesita y gracias a ello pueden llegar más personas a las congregaciones para alabar y bendecir el nombre del Señor.
Asi como se ahorra para comprar un bien material, como casa, carro, muebles, viajes, se ahorra en el cielo en oraciones y buenas obras para recibir misericordia prontamente cuando se necesita. Las oraciones de los cristianos llegan con olor fragante a la presencia de Dios y son recogidas en una copa divina, que se derrama en bendiciones cuando son necesarias para recibir los milagros que esperamos de Dios.
Tus oraciones de hoy son la cuota inicial de las miles y maravillosas bendiciones que Dios tiene para todos. Esta esperando que llames, que ores, que le sirvas, que estes al tanto de las necesidades materiales y espirituales de sus hijos y de aquellos que van a recibir a Jesucristo como Señor y Salvador personal.
Solo debemos repetir esta pequeña oración creyendo "Señor Jesús, te acepto en mi vida como Señor y Salvador personal. Te pido que perdones mis pecados, que cambies y renueves mi vida, te sientes en el trono de mi corazón y me escribas en el libro de la vida. Amen".
Jesús no se quedó en la cruz, el resucito y está sentado a la diestra de Dios Padre, intercediendo por todos nosotros para que recibamos sanidad, vida en abundancia y bendición para siempre.
Dios te bendiga
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